Durante los días 19 al 22 de octubre del 2016, Héctor Manuel Jacobo García y Enrique Ibarra Aguirre, investigadores de la Red Mexicana de Investigación de Educación Rural (RIER) y de la recién conformada Red Española RIETER, fueron invitados por Pilar Abós Olivares, Coordinadora de ésta, con el objetivo de estrechar vínculos de colaboración en materia de investigación en educación rural y compartir experiencias innovadoras entre la escuela rural mexicana y la escuela rural aragonesa.

Allí fueron recibidos por Marta Ramo Garzarán, Profesor de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad de Zaragoza. Una de las actividades realizadas fue suparticipación en la estrategia de trabajo académico que se lleva a cabo en el Centro Rural de Innovación Educativa de Teruel (CRIET) de Calamocha (http://crietcalamocha.catedu.es/), mismo que de acuerdo con María Dolores Esteban Sanz, directora del centro, fue creado como un espacio compensatorio para reducir las desigualdades del alumnado que asiste a las escuelas rurales incompletas y unitarias aragonesas y a la vez, procurar ser apoyo para la labor docente de los profesores.

Ese centro de innovación educativa acuden alumnos de 5° y 6° grado de los Colegios Rurales Agrupados (CRA) de la provincia de Teruel durante una semana, en donde estudian los temas propuestos de forma colegiada por sus maestros. Se trata de una experiencia pedagógica creativa que potenciando la interacción humana, logra la integración de los niños de las comunidades que acuden al CRIET como punto de encuentro.

La visita a un Colegio Rural Agrupado (CRA) Teruel-1 (http://crateru1.educa.aragon.es/), fue otra actividad realizada. El CRA es un complejo educativo integrado por unidades escolares interconectadas, distribuidas en siete municipios.

El acompañamiento de José María Martínez Martí, director de este centro, facilitó el reconocimiento del contexto de trabajo de las unidades escolares de Alfambra, Perales de Alfambra, Camañas y Argente. Conviene destacar que los profesores de las distintas unidades del CRA además de atender a los niños españoles, extienden generosamente el servicio educativo a un alto porcentaje de inmigrantes en espacios físicos dignos con la infraestructura y equipamiento adecuada que favorecen el desempeño de los profesores y los aprendizajes en los niños.

Resta decir que el trabajo pedagógico colectivo realizado en los CRA´s y CRIET´s, así como la interacción humana y profesional que los sostiene, merecen ser reflexionados con mayor profundidad para generar y enriquecer el repertorio de conocimientos de la profesión docente con oportunidad de influir en otros contextos.